Siete buenos hábitos alimenticios que favorecen la salud bucal

Manzana

Por todos es sabido que las chucherías dañan los dientes -además de que tampoco sean muy buenas que se diga para nuestra salud en general. Sin embargo, la alimentación va mucho más allá, cuando a salud bucal se refiere, que el simple hecho de evitar las golosinas.

Veamos a continuación algunos consejos que pueden ayudarnos a mantener una salud bucal óptima:

  1. Consume suficiente fibra: La ingesta adecuada de alimentos con alto contenido de fibra no sólo ayuda el buen funcionamiento del tracto intestinal, sino que hace también un efecto de barrido sobre la superficie dentaría mientras vamos comiendo. De esta manera, por ejemplo, al comer una manzana, el hecho de morderla, en cierta medida, barre la superficie de los dientes, eliminando restos de otros alimentos. Evidentemente esto no reemplaza el cepillado, pero ejerce un efecto favorable.
  2. Come alimentos ricos en grasas sanas: Los alimentos como las almendras, los anacardos y los aguacates, entre otros, contienen grasas buenas para el organismo en general, y que también ayudan a proteger y a mantener en buena salud la superficie del esmalte. De esta manera, es ideal consumir -aunque de forma moderada- estos ingredientes.
  3. Evita los carbohidratos refinados: Aquí no sólo hablamos de las famosas golosinas, sino que incluimos también la bollería industrial, la repostería, las harinas blancas, el azúcar como tal, entre otros. Los alimentos ricos en carbohidratos refinados son el sustrato perfecto para favorecer el desarrollo de las bacterias causales de la caries ya que al degradarse sus restos en la cavidad bucal disminuye el pH del medio.
  4. Come abundantes frutas que contengan vitamina C: Es bien sabido que nuestros organismo necesita un adecuado aporte de vitaminas y minerales, una específica que necesitamos para la buena salud de los dientes es la vitamina C, presente en tomates, cítricos, fresas, etc. Sin embargo, es importante tener en cuenta que debemos esperar de 15 a 30 minutos antes de cepillarnos tras la ingesta de alimentos ácidos para permitir a la saliva realizar su efecto de amortiguación del pH bucal.
  5. Evita la ingesta excesiva de alimentos que producen tinción dental: Si bien los alimentos ricos en betacarotenos son necesarios para la salud, y a muchos de nosotros nos agrada beber té y café, debemos ingerirlos en la cantidad moderada. Su consumo excesivo puede producir tinciones amarillentas en la superficie dentaria, y aunque éstas pueden mejorar o ceder tras una profilaxis o blanqueamiento dental realizados por el odontólogo, corremos el riesgo de volver a presentar una decoloración si continuamos ingiriéndolos en exceso.
  6. Garantiza un aporte suficiente de calcio biodisponible: Actualmente existe polémica acerca de si consumir o no lácteos y de cuán biodisponible o no se encuentra el calcio procedente de estos derivados. Algunas fuentes de calcio biodisponible, aparte de los lácteos, son el tofu, el sésamo, las sardinas, las coles de Bruselas, la espinaca, las naranjas, los espárragos, el apio, el ajo, entre otros. Más información sobre fuentes de calcio biodisponibles, en inglés aquí)
  7.  Asegúrate una adecuada ingesta de agua: Todas las dietas saludables lo recomiendan, y sabemos lo sano y necesario que es beber agua, pero cuando se trata de la salud bucal, toca considerar otro punto además de la hidratación. El agua, como líquido con pH neutro por excelencia, no sólo enjuaga algunos restos de alimentos que pudieran quedar pegados de los dientes tras la comida, sino que ayuda también a restablecer el pH bucal idóneo.